El dólar estadounidense es la divisa de referencia a nivel internacional. Es la moneda más utilizada por gobiernos y bancos centrales para realizar sus transacciones, inversiones y cumplimiento de obligaciones. Es la divisa en la que se efectúa la mayor parte de los intercambios comerciales y es la moneda que determina el precio de muchos de los bienes y servicios que se consumen en los países. De ahí que, el dólar sea el principal depósito de valor y medio de pago. Al ser la divisa de referencia, las variaciones en su precio afectan a gobiernos, bancos centrales, empresas, personas e inversionistas, de manera positiva o negativa. A continuación, le contamos cómo impacta la cotización del dólar en algunos instrumentos financieros de inversión.
Apreciación del dólar: impactos positivos y negativos en activos financieros
Durante este año, la divisa estadounidense se ha valorizado a nivel mundial. Según el indicador Bloomberg Dollar Spot Index, citado por BBC, entre mayo de 2021 y mayo de 2022, el dólar se ha apreciado en un 12%, con relación a otras monedas fuertes, como el euro. Tan solo en este año, con corte a mayo, la valorización de la moneda estadounidense fue del 7%. La consecuencia directa del aumento en el precio del dólar en la economía es el encarecimiento de los bienes y servicios importados o que en algún punto de su cadena productiva tuvieron relación con esta moneda. En cuanto a la inversión, ocurre algo similar: invertir en activos basados en esta divisa se vuelve más costoso, en comparación con un dólar de menor valor. Sin embargo, para los inversionistas que depositaron su dinero en instrumentos financieros basados en esta moneda, la apreciación resulta favorable. Si usted destinó capital a Fondos de Inversión Colectiva (FIC), Fondos Voluntarios de Pensión u otro tipo de fondos con exposición al dólar o a la Tasa Representativa del Mercado (TRM), puede ocurrir que su inversión se vea favorecida con la apreciación de esta divisa. Lo mismo podría suceder con depósitos o Exchange Traded Funds (ETFs) en dólares. Los primeros, son un producto financiero de ahorro que genera una ganancia al final de un periodo de tiempo. La rentabilidad depende del tipo de interés fijado y de las variaciones en el tipo de cambio. Y, los segundos, son fondos bursátiles que replican el comportamiento de activos basados en la divisa estadounidense. Respecto a las acciones, el impacto de la apreciación del dólar dependerá de la compañía en la que ha invertido su dinero. Por ejemplo, la inversión en empresas importadoras con deuda en esta divisa o en compañías que dependen de insumos que se compran en la moneda estadounidense podrían verse afectadas. Sin embargo, los títulos de renta variable de empresas exportadoras pueden favorecerse con la apreciación. Finalmente, tenga en cuenta que, el dólar es un activo altamente volátil. Por eso, le recomendamos diversificar su portafolio de inversión, con el objetivo de minimizar el riesgo y las posibles pérdidas ante la subida o bajada de esta divisa.
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