2017 el año para comprar vivienda propia

Durante generaciones, comprar una vivienda ha sido el sueño de muchas personas y familias, pues asegurar un lugar propio para vivir genera mucha tranquilidad financiera a corto y largo plazo.   Este año, en especial, se han ampliado las posibilidades para los colombianos de tener casa propia, afirma el Ministerio de Vivienda, ya que las modificaciones hechas en junio de 2017 al principal programa gubernamental de subsidio de vivienda, Mi Casa Ya, beneficiarán a más personas durante más tiempo. De un lado, se amplió el rango de hogares beneficiarios, incluyendo ahora a los que ganan un salario mínimo. Antiguamente sólo podían aplicar a los subsidios familias que ganaran de dos a cuatro salarios mínimos. Adicionalmente, se amplió el tiempo para otorgar los 92.000 cupos para subsidios que da el gobierno. Ahora se podrán adjudicar hasta 2019, anteriormente el beneficio terminaba en el 2018. Juan Sebastián Pardo, presidente de Credifamilia, coincide con la opinión en que es un buen año para adquirir vivienda, ya que “pocas veces se habían tenido condiciones tan propicias para comprar vivienda” como lo afirmó en una entrevista al diario Portafolio. Pardo destaca que las políticas gubernamentales de impulso al sector vivienda ayudan especialmente a los grupos familiares de estratos 1 a 4. Estas políticas gubernamentales se resumen en el programa Mi Casa Ya que incluye los subsidios: cuota inicial, tasa de interés y leasing habitacional. Con el programa Mi Casa Ya-Cuota Inicial, el beneficiario debe buscar en el mercado inmobiliario la vivienda nueva que más le interese, teniendo en cuenta que su precio no sea superior a $93.076.425 (para el 2017). Después, debe ir a cualquier entidad financiera o al Fondo Nacional del Ahorro para tramitar un crédito hipotecario. Desde ahí, a través de una base de datos, y casi de manera inmediata, sabrá si cumple con los requisitos para acceder a los beneficios del programa. Estos son: no ser propietario de una vivienda, no haber recibido anteriormente un subsidio por parte de las cajas de compensación o el Estado, tener ingresos familiares de hasta cuatro salarios mínimos y tener el crédito hipotecario aprobado. Este subsidio a la cuota inicial tiene otra modalidad y es Mi Casa Ya – Ahorradores, que está dirigido especialmente a familias con ingresos de hasta 2 salarios mínimos que quieran comprar viviendas de interés social. En este caso, se debe aportar un ahorro equivalente al 5% de la cuota inicial de la vivienda para acceder al subsidio. La idea es que las familias puedan tener casa propia sin comprometer más del 30% de sus ingresos mensuales en el pago de las cuotas del crédito que se les otorgue para la adquisición de vivienda. Mi Casa Ya-Subsidio a la tasa de interés beneficia especialmente a los hogares con ingresos de hasta de ocho salarios mínimos ($5.901.736) para la financiación de viviendas nuevas urbanas cuyo valor no exceda los $99.591.795 y que cumplan los mismos requisitos para otorgar un subsidio a la cuota inicial. El beneficio del subsidio a la tasa de interés consiste en un aporte a las mensualidades de pago del crédito hipotecario, rebajando así el valor de estas durante las primeras 84 cuotas. Antes de las modificaciones hechas este año al programa Mi Casa Ya, los subsidios sólo podían otorgarse a familias que tenían un crédito hipotecario tradicional. Ahora pueden aplicarse también a los leasing habitacional o arriendos con opción de compra: una forma de financiación en la que el banco con el que se tiene la obligación, es el dueño inicial de la vivienda y el deudor paga un arrendamiento por determinado tiempo (por ejemplo, 10 años o menos) y luego puede dar el dinero faltante para comprar la vivienda subsidiada. Vale destacar que, aunque la entidad bancaria figura como dueña del inmueble, durante la vigencia del leasing habitacional, esto no exime a las personas de las obligaciones normales como el pago de los impuestos de la vivienda. Las nuevas condiciones de estos subsidios para la adquisición de vivienda propia permitirán a muchos hogares iniciar el proceso para tener una casa y de esa manera cumplir con el sueño que muchos tienen. Además “en momentos como estos en los que la economía ha tenido dificultades, es aún más importante para los hogares dejar de lado las compras y consumos innecesarios para enfocarse en inversiones sólidas y duraderas como la compra de una casa”, concluye el Presidente de Credifamilia .

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