Dependiendo de sus ingresos mensuales, usted podrá ser sujeto de la retención en la fuente para 2020. Sin embargo, antes de llegar a este punto, empecemos por definir en qué consiste este recaudo. Lo primero que debe saber es que la retención en la fuente no es un impuesto, es un cobro anticipado que hace el Gobierno sobre algunos tributos.
El impuesto a la renta, el impuesto a las ventas, el impuesto de timbre nacional y el impuesto de industria y comercio son tributos que se cobran anticipadamente por medio de la retención en la fuente. Para este caso, nos referiremos específicamente a los empleados y trabajadores que pueden ser sujetos del impuesto de renta por medio de esta figura.
Para 2020, quienes ganen desde 87 Unidades de Valor Tributario (UVT) mensuales serán sujetos de la retención en la fuente
Hasta 2018, quienes tuvieran ingresos mensuales desde 95 UVT aplicaban a este cobro. Sin embargo, con el fin de que más personas fueran incluidas y poder aumentar el recaudo por este rubro, para 2019 y 2020 la cifra fue reducida a 87 UVT a través de la reforma tributaria planteada.
(Lo invitamos a leer el artículo “¿Qué es UVT, cómo se calcula y cuál es su valor para 2020?”)
Si usted gana el equivalente a 87 UVT mensuales, es decir, $3.097.809 o más, la retención en la fuente se le cobrará mes a mes como pago anticipado del impuesto a la renta. Vale la pena aclarar que este valor incluye las deducciones a las que tiene derecho un empleado, tales como pensiones (4%), salud (4%), solidaridad (1% cuando los ingresos superan los 4 salarios mínimos mensuales) y la renta laboral (25%). Si usted aplica para este mecanismo de recaudo, no tendrá que realizarlo directamente, este será descontado de su salario antes de que le llegue el pago.
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