¿Cómo usar las rentas vitalicias y las inversiones para complementar su pensión?

Al acercarse a la etapa de la jubilación, uno de los mayores retos financieros que enfrentamos todos es garantizar un ingreso suficiente y sostenible para mantener nuestra calidad de vida. Aunque la pensión de jubilación es una base importante, en muchos casos no es suficiente para cubrir todas las necesidades futuras. 

Por eso, las rentas vitalicias y las inversiones planeadas se convierten en una estrategia clave para asegurar su tranquilidad financiera en el futuro. En este artículo, conozca qué son las rentas vitalicias, cómo se comparan con las inversiones tradicionales y qué factores debe considerar para construir un flujo de ingresos estable y duradero.

¿Qué son las rentas vitalicias?

Una renta vitalicia es un contrato que usted firma con una aseguradora. A cambio de entregar una suma de dinero (conocida como prima única), la aseguradora se compromete a pagarle un ingreso fijo mensual durante su vida. Lógicamente, la cantidad a cobrar está directamente relacionada con el dinero que aportó y otros factores como la edad. Al final, se calcula cuánto podrá recibir cada mes en función de su esperanza de vida.

Si bien el aporte se realiza normalmente con una prima única, es decir, un solo aporte inicial, también hay rentas vitalicias que permiten aportes periódicos. Una de las ventajas de estos seguros es la certeza que ofrecen. Usted no tendrá que preocuparse por la gestión de inversiones ni por el riesgo de quedarse sin fondos en su vejez. Está recomendada para quienes están cerca de jubilarse, o ya están jubilados, y han acumulado cierto patrimonio.

Sin embargo, también existen aspectos que se deben considerar. Al contratar una renta vitalicia, generalmente usted pierde el acceso al capital entregado porque lo que hizo fue adquirir un seguro. En otras palabras, ya no podrá disponer libremente de ese dinero. Por eso, la decisión debe tomarse con una visión clara de sus necesidades de liquidez, sus gastos futuros y sus prioridades familiares.

¿Cómo funcionan las inversiones para generar ingresos periódicos?

Otra manera de complementar la pensión es a través de inversiones diseñadas para generar ingresos de manera constante. A diferencia de las rentas vitalicias, en estas opciones usted mismo maneja su capital, aunque también asume ciertos riesgos. Conozca, a continuación, algunos de los instrumentos más utilizados:

• Certificados de Depósito a Término Fijo (CDT). Son productos financieros que permiten invertir una suma de dinero a un plazo fijo, a cambio de una tasa de interés pactada. Al vencimiento, usted recibe su capital más los intereses. En algunos casos, puede pactar pagos periódicos de intereses, lo cual se convierte en una forma sencilla de generar ingresos. 
• Fondos de Inversión Colectiva (FIC) con reparto de utilidades. Existen FIC que invierten en diferentes activos (acciones, bonos, inmuebles, divisas) y reparten periódicamente las ganancias entre los inversionistas. Esta opción permite diversificar el riesgo y recibir ingresos constantes, pero sus rendimientos pueden variar según el comportamiento del mercado.
• Dividendos de acciones. Si usted invierte en acciones de empresas que reparten dividendos, puede recibir pagos regulares —trimestrales o anuales— dependiendo de las utilidades de la compañía. Esta estrategia ofrece un flujo atractivo en el largo plazo, aunque requiere una mayor tolerancia al riesgo y un conocimiento del mercado.
• Inversiones en bienes raíces para arriendo. Comprar un inmueble para alquilar es otra opción para generar ingresos periódicos. Los arrendamientos pueden ofrecer una fuente estable y predecible de dinero, especialmente si la propiedad está bien ubicada. Sin embargo, también implica responsabilidades como el mantenimiento, la gestión de arrendatarios, el pago de impuestos y el riesgo de vacancia.

La ventaja de invertir directamente es que usted conserva el control sobre su dinero, puede ajustar la estrategia según sus necesidades cambiantes y, en algunos casos, buscar mejores retornos que los ofrecidos por una renta vitalicia. No obstante, esta opción implica asumir riesgos, como la volatilidad de los mercados o la posibilidad de que los rendimientos no sean suficientes para cubrir sus gastos en el largo plazo.

En conclusión, no existe una opción que sea mejor en todos los escenarios. Todo dependerá de su perfil de riesgo, su expectativa de vida, sus necesidades de liquidez y sus objetivos personales. Las rentas vitalicias ofrecen seguridad y estabilidad, mientras que las inversiones brindan flexibilidad y la posibilidad de obtener mayores rendimientos. 

En algunos casos, una combinación de ambas puede ser la mejor manera de diversificar las fuentes de ingreso y equilibrar los riesgos. Por eso, es fundamental analizar su situación con detenimiento y contar con asesoría financiera que le permita tomar decisiones informadas y construir una estrategia sostenible a largo plazo.