Cuando una persona decide invertir en un Fondo Voluntario de Pensión (FVP) no solamente está construyendo un ahorro para el futuro, sino que también está accediendo a importantes beneficios tributarios que hacen que este instrumento de inversión sea aún más atractivo. Sin embargo, para conservar esos beneficios es clave entender que hay reglas específicas, especialmente cuando llega el momento de hacer un retiro.
No todos los retiros de un Fondo Voluntario de Pensión (FVP) reciben el mismo trato, y desconocer estas condiciones podría significar perder beneficios valiosos. Por eso, antes de tomar cualquier decisión, es fundamental conocer qué sucede si retira su dinero antes del tiempo mínimo requerido y cómo garantizar que cada peso que invierte sí esté cumpliendo con su propósito de darle seguridad financiera en el futuro.
El atractivo de invertir en un Fondo Voluntario de Pensión (FVP)
Los FVP son vehículos de inversión que le ayudan a construir un patrimonio para su retiro, pero que también ofrecen ventajas fiscales significativas. Según el Estatuto Tributario, los aportes que realiza al FVP pueden considerarse como renta exenta siempre que no superen las 3.800 Unidades de Valor Tributario (UVT). Esto significa que esos aportes no hacen parte de la base para liquidar su impuesto de renta. Sin embargo, este beneficio está condicionado al máximo de rentas exentas que puede tomar una persona natural, el cual es del 40% de su renta líquida o hasta un tope de 1.340 UVT.
Los requisitos claves para mantener la exención de renta
Uno de los principales requisitos para conservar los beneficios tributarios es mantener cada aporte al menos durante 10 años en el Fondo Voluntario de Pensión (FVP). Si hace un retiro antes de cumplir este plazo, pierde el derecho a la exención de renta para esos aportes en específico. Es decir, ese retiro sería considerado como renta gravable.
Esto podría representar un costo importante a la hora de presentar su declaración y realizar la respectiva retención en la fuente. Por ejemplo, si aportó $10 millones a un FVP hace cinco años, pero ahora necesita retirar antes de cumplir el periodo de 10 años, ese valor tendría que incluirse en la declaración de renta del año en que realice el retiro, perdiendo el beneficio de exención.
Ahora bien, existen dos situaciones concretas en las que, aunque retire los recursos antes de cumplirse el periodo de permanencia de 10 años, no pierde el beneficio de renta exenta:
- Cumplir con los requisitos para obtener pensión: Si llega a pensionarse o a cumplir los criterios para recibir una pensión de vejez, invalidez o sobrevivencia, los aportes realizados al FVP quedan exentos de renta al momento del retiro.
- Utilizar los fondos para una vivienda: Si destina estos recursos para la compra de vivienda, para amortizar un crédito hipotecario o para alimentar una Cuenta AFC (Ahorro para el Fomento de la Construcción), el retiro mantiene la exención fiscal.
El impacto del 4×1.000 en los retiros
Otra ventaja de los Fondos Voluntarios de Pensión (FVP) es que los retiros realizados no están sujetos al Gravamen a los Movimientos Financieros (más conocido como 4×1.000), siempre que tanto la cuenta de origen como la de destino pertenezcan al mismo titular y los movimientos sean dentro de cuentas de la misma entidad financiera.
En conclusión, invertir en un FVP es una decisión inteligente para construir patrimonio, pero requiere planificación para que cada aporte cumpla con los criterios previstos en la norma tributaria. De esta manera, podrá garantizar que estos fondos trabajen para su tranquilidad financiera y que los retiros, en el momento adecuado, no solo le proporcionen liquidez, sino que le aseguren un ahorro significativo en materia de impuestos.
Indique el motivo de su respuesta:
No entendí el contenido.No estoy de acuerdo con la información brindad.
