Cada cierto tiempo, el mercado de capitales puede experimentar períodos de mayor volatilidad como respuesta a acontecimientos o cambios a nivel social, político o económico. Recuerde que este término mide la variabilidad o fluctuación de los precios, rentabilidades o tipos de interés de un activo financiero.
En épocas de volatilidad, la confianza de los inversionistas suele decaer, nublando sus perspectivas de inversión. Pensando en el corto plazo, algunos inversionistas optan por retirar los recursos. Sin embargo, uno de los consejos de la gestora de activos financieros, Fidelity International, es ser pacientes y mantener los objetivos de inversión.
Para Enrique Castellanos, director del Instituto Bolsas y Mercados Españoles, la volatilidad es un elemento de las inversiones y, en consecuencia, no se trata de evitarla, sino de gestionarla y adecuarla al perfil, objetivos y horizontes de inversión.
De ahí que, especialistas consultados por El País de España, sugieren mantener las inversiones pensando en el largo plazo, pues estas pueden llegar a generar mayores rendimientos con la recuperación del mercado.
Según Fidelity International, cuando los inversionistas intentan acertar en tiempos de volatilidad, entrando y saliendo del mercado, pueden correr el riesgo de impactar las rentabilidades futuras, ya que pueden perder los días de mayor recuperación y las oportunidades de compra más atractivas, las cuales, por lo general, aparecen en periodos de incertidumbre y pesimismo.
Otra de las recomendaciones es diversificar el portafolio en activos, sectores y regiones. Una cartera diversificada permite minimizar los movimientos del mercado y reducir la incertidumbre, pues las pérdidas de un activo pueden ser compensadas con las ganancias de otro.
¿En qué se recomienda invertir?
Siendo la diversificación un factor que puede contribuir a minimizar el riesgo en periodos de volatilidad, es importante que las personas conformen un portafolio con distintos activos.
De acuerdo con Fidelity International, los inversionistas pueden optar por combinar una cartera de activos de “alto riesgo” como las acciones y los bonos corporativos, con activos más “defensivos” como la deuda pública, los bonos corporativos de alta calidad crediticia y activos monetarios, aunque esto depende del perfil de riesgo de cada inversionista.
En cuanto a las acciones, se sugiere invertir en compañías con alta generación de ingresos, poca deuda y gran trayectoria. Dependiendo de la coyuntura, es recomendable analizar el sector al que pertenece la empresa. Según los especialistas consultados por El País, es preferible invertir en índices bursátiles, constituidos por portafolios de acciones, pues suelen ser más estables que las acciones individuales.
Otras opciones que tienen las personas, son los fondos que invierten los recursos en varios activos, como los Fondos de Inversión Colectiva (FIC) y los Fondos Voluntarios de Pensión (FVP), o activos refugio como el oro, que en épocas de incertidumbre son capaces de mantener la estabilidad e incluso aumentar su valor.
En definitiva, en periodos volátiles se recomienda ser pacientes, mantener los recursos y gestionar la inversión conforme a su perfil, objetivos y horizontes. Para ello, se sugiere pensar en el largo plazo y diversificar el portafolio en activos, sectores y regiones. Recuerde siempre asesorarse con expertos ante la incertidumbre que le puedan generar los periodos de volatilidad.
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